El sol, el cloro, el agua salada, los tratamientos de belleza agresivos, el estrés y la contaminación son las principales causas de la fragilidad capilar. La capa más externa del cabello (cutícula) se deshilacha, permitiendo la penetración de sustancias potencialmente dañinas para la salud de la fibra capilar.

Al principio, el daño no es visible, pero con el tiempo, los tallos capilares pierden su integridad. El cabello pierde su forma, se vuelve opaco, pierde volumen y, a menudo, se degenera, formando puntas abiertas. Para restablecer el correcto aporte de nutrientes al cabello dañado se necesitan productos que tengan la función de cerrar los espacios vacíos que se han creado entre las fibras del córtex y de redensificar la estructura interna de la fibra capilar..

El champú de azúcar y coco para cabello dañado realiza una acción limpiadora respetando por completo la estructura de la queratina., ayudando con el extracto de culantrillo a nutrir las capas más externas mientras que el extracto de ginseng estimula el tono capilar.

• extractos de ginsengAporta nutrientes esenciales al cabello y al cuero cabelludo, ayudando a mantener el cabello hidratado, suave y brillante. Combate los radicales libres, que pueden contribuir al envejecimiento prematuro del cabello, manteniéndolo más joven y con mayor vitalidad.
• extracto de helecho culantrilloPropiedades fortalecedoras que ayudan a estimular el crecimiento del cabello. Sus ingredientes activos promueven la salud de los folículos pilosos, favoreciendo un cabello más fuerte y vigoroso.

Aplicar una pequeña cantidad de producto sobre el cabello húmedo y masajear suavemente hasta formar una espuma suave y cremosa.
Enjuague bien con agua tibia y repita la operación si es necesario.